Una paracaídista del Ejército británico ha ganado una demanda contra el Ministerio de Defensa de aquel país. Recibirá una indemnización de más de €310.000 por haber sufrido humillaciones e insultos. La capitán Jan Hamilton es una veterana de la guerra de Irak, donde fue herida por la explosión de una bomba. O sea, herido, porque cuando estaba destinada allí era un hombre, de nombre Ian.
Hamilton dice haber sentido humillada cuando fue ordenada a llevar su uniforme de varón en vez de él de mujer a un chequeo médico obligatorio.
El asunto ha generado polémica en el Reino Unido, ya que los soldados que pierden una pierna en el combate reciben una indemnización de solo €71.000.
(Daily Telegraph)
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